
Tengo que reconocer que hacía tiempo que no pasaba un fin de año como este. Vi a todos mis amigos, en diferentes lugares (que la noche dio para mucho) y el reencuentro fue genial. Las bromas de siempre, los de siempre, reviviendo los viejos momentos que siempre están ahí aunque por culpa de los deberes como personas no tengamos tanto tiempo para revivirlos con tanta asiduidad como nos gustaría.
Siempre he dicho que las cosas que no se planean son las que mejor salen; una contradicción para alguien como yo. Pero es así.
¿Porpósitos para este año? Pues supongo que continuar con los propósitos que una se hace en su vida diaria. Y sobre todo aplicar la frase de: RELAX, TAKE IT EASY!.
Tomarse la vida con calma, y esto por consiguiente me ayudará a otro de mis propósitos, no morderme tanto la boca. Manía que tengo desde que era pequeña y a la que siempre acudo cuando estoy nerviosa con el resultado de unas heridas que ¡ni la peor de las masoquistas señores!
Parezco discípula de la autoflagelación. Así que voy a intentar hacerlo menos.
Y nada, mi primer día de trabajo de 2011 transcurre tranquilo. Además, una que yo me sé va a venir a visitarme y promete traer café calentito. Algo magnífico para combatir la jornada de trabajo, el frío de este viejo edificio y el resfriado que se está apoderando de mi por momentos.
Mi 2011 comienza con aroma de café y buena compañía, sólo deseo para este año que termine de la misma manera.
FELIZ 2011 a vosotros también.
"Siempre ahy un poco de locura en el amor. Pero siempre hay un poco de razón en la locura" (F. Nietzsche)